Aprendemos en silencio el valor del vacío. Y es encima de él que construimos los muros de la casa, nacidos así salvos de hundirse por su peso. Con el vacío llenamos el hueco de las puertas, y le abrimos su marco a las ventanas, y ganan los pasillos la extensión de su trance y su tránsito.
Está hecho de vacío ese corte angular que llaman escalón. Con vacío se traza la amplitud de los quicios. De vacío se llenan las estancias para que sea posible soñarlas ocupadas.
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SANTO Y SEÑA
Nacido en la Ciudad de México en 1971, radica en Morelia desde 1984. Entre otros premios ha obtenido el primer lugar en el II Premio FILIJ de dramaturgia "El mejor teatro para niños" 1996, el premio a mejor obra de teatro para jóvenes en el Primer Certamen Nacional de Teatro Infantil y Juvenil 2005-2006, el Concurso de Cuento Salvador Azuela del INEHRM, el Premio Puebla de Ciencia Ficción y Fantasía y el VI Premio de Literatura Experimental Sporting Club Russafa. Ha publicado dos volúmenes de dramaturgia (Los ojos perdidos de Mirmidón, 1996, Como esperando a Godoy, 1999), una novela (La sombra de Pan, 1997), un volumen de narrativa experimental (Abecerial Killer, 2017), tres libros y una plaquette de poesía (El manar de la sombra, 1997, Las raíces del aire, 2008, Instantáneas del distante, 2011, Camlann 2011), y tres volúmenes de cuento (La razón de los monstruos, 2000, El canto de las ranas, 2004 y En cueros, 2010).
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